La construcción de la estructura es uno de los aspectos más importantes en la edificación de un quincho. Esta fase marca el inicio de la transformación del terreno en una estructura tangible, y es crucial que se realice de manera precisa para garantizar la estabilidad, la seguridad y la funcionalidad del espacio. La estructura soportará todo el peso del techo, las paredes, los pisos y las instalaciones, por lo que debe ser diseñada y ejecutada correctamente.
El proceso comienza con la instalación de los cimientos, que previamente han sido preparados según las especificaciones del estudio de suelo y el diseño arquitectónico. Los cimientos son la base que soportará toda la estructura, por lo que es esencial que estén bien nivelados y alineados. Si se optó por una cimentación profunda, como pilotes, es necesario que estos se asienten correctamente en el terreno. Una vez que los cimientos están completos, se procede a la construcción de las primeras paredes que se elevarán desde estos.
La estructura principal del quincho se forma generalmente con columnas, vigas y losas, elementos que actúan como el esqueleto que sostiene todo el edificio. En muchos casos, las columnas de concreto o ladrillo se utilizan para distribuir el peso de la estructura de manera uniforme. Las vigas son esenciales para la conexión de las columnas y para sostener el techo. Si el diseño incluye una losa de entrepiso o de techo plano, se instalarán refuerzos metálicos o de madera, según el tipo de construcción. Es fundamental que las vigas y columnas sean colocadas en las posiciones correctas y respeten los planos arquitectónicos.
En el caso de las paredes exteriores e interiores, se utilizarán materiales como ladrillos, bloques de hormigón o paneles de madera, dependiendo del diseño y el estilo elegido. Las paredes exteriores no solo sirven como barrera física, sino que también actúan como aislamiento térmico y acústico. Las paredes interiores, que pueden ser de un material más liviano, separan los diferentes espacios dentro del quincho, como la zona de parrilla, el comedor o el área de descanso. Durante la construcción, es importante garantizar que todas las paredes estén alineadas y niveladas para evitar problemas estructurales a futuro.
Uno de los elementos clave en la construcción de la estructura es la correcta integración de las aberturas, como ventanas y puertas. Las aberturas deben estar enmarcadas adecuadamente en las paredes y alineadas con los planos de diseño. Las ventanas y puertas no solo son esenciales para la ventilación y el acceso, sino que también contribuyen a la estética del quincho. Además, es importante que las aberturas estén correctamente selladas para evitar filtraciones de agua o aire, especialmente en áreas con climas variables.
El techo es otra parte fundamental de la estructura. Dependiendo del diseño elegido, puede tratarse de un techo a dos aguas, a cuatro aguas o un techo plano. La elección del tipo de techo influirá directamente en los materiales a utilizar y en la cantidad de trabajo necesario. Los techos a dos aguas, por ejemplo, requieren una estructura de vigas y tirantes que soporten el peso de las tejas o de la chapa galvanizada. En el caso de un techo plano, las vigas y los refuerzos deben ser más robustos para resistir la carga del techo y evitar filtraciones de agua.
El aislamiento térmico es otra consideración importante durante la construcción de la estructura. Dependiendo del clima local, puede ser necesario incorporar materiales aislantes en las paredes y el techo. Esto no solo mejora la eficiencia energética, sino que también contribuye al confort interior, evitando que el espacio se sobrecaliente en verano o se enfríe excesivamente en invierno. Materiales como el poliestireno expandido (EPS), la lana de vidrio o la espuma de poliuretano son comúnmente utilizados en estos casos.
Una vez que la estructura básica está construida, es hora de revisar que todo esté correctamente alineado y nivelado. Esto se debe hacer con especial cuidado, ya que cualquier error en la alineación puede afectar la estabilidad y la estética del quincho. Los profesionales encargados de la construcción deben utilizar herramientas de nivelación y medición precisas para asegurar que las columnas, vigas y paredes estén en la posición correcta.
En esta fase de la construcción, también es crucial la instalación de refuerzos adicionales, como los cables de acero o las mallas de refuerzo, que se integran en las paredes y techos. Estos refuerzos aseguran que la estructura sea lo suficientemente fuerte para resistir las tensiones y fuerzas externas, como el viento o el peso de la nieve en caso de climas fríos. Además, los refuerzos permiten que la estructura se adapte mejor a los movimientos sísmicos en áreas propensas a terremotos.
Otro aspecto importante es la correcta integración de las instalaciones, como el sistema eléctrico, las tuberías de agua y gas, y los sistemas de ventilación. Estas instalaciones deben ser planificadas desde el inicio de la construcción para evitar modificaciones costosas una vez que la estructura esté levantada. Las tuberías y cables deben ser colocados en lugares adecuados, con protección adecuada, y siempre respetando las normativas de seguridad locales.
Finalmente, una vez que la estructura del quincho está completamente terminada, se procede con la inspección final. Este paso es esencial para asegurarse de que todos los elementos estructurales estén correctamente instalados y que el edificio sea seguro para su uso. En caso de detectar algún problema, como una viga mal colocada o una pared fuera de nivel, se deben realizar los ajustes necesarios antes de continuar con las siguientes fases de la construcción.
La construcción de la estructura es una etapa que requiere una planificación meticulosa, la elección de materiales adecuados y la ejecución precisa de cada paso. La estructura no solo debe ser sólida y segura, sino también funcional y adecuada al diseño del quincho. Un trabajo bien hecho en esta fase garantiza que el quincho sea un espacio duradero y cómodo, cumpliendo su función durante muchos años.